domingo, 27 de septiembre de 2009

Un vivero de Medina de las Torres comercializa una encina de crecimiento acelerado que produce bellota al cuarto año.

Siempre que Primitivo Rodríguez salía a correr por los alrededores de Medina de las Torres llegaba a casa con la misma idea: «Qué pena que la dehesa se esté muriendo, cada vez hay menos encinas». Un sentimiento que siempre rondaba la cabeza de este productor de cine afincado en Madrid y que gracias a un cúmulo de casualidades se convirtió en un proyecto empresarial consistente en desarrollar un tipo de encina de rápido crecimiento que ayuda a repoblar el más representativo ecosistema de Extremadura.
El siguiente paso para sacar adelante la idea tuvo como escenario el pasillo de un hospital de Pamplona. Mientras acompañaba a su padre, Rodríguez conoció a un profesor de la Universidad de Navarra que trabajaba en la estimulación del crecimiento de árboles. Poco meses después, Primitivo Rodríguez, a través de la Fundación Contributa Lulia, encargó a especialistas de este centro universitario que hicieran un estudio sobre la implantación de sus técnicas en la encina extremeña. Ya estaba todo en marcha y poco después el vivero Medinaflor se convertía en el primero de España en comercializar este tipo de magnífico 'quercus'.
El secreto
Una 'súper encina' necesita salir de una buena bellota. De ahí que el primer paso sea la selección de las mejores semillas. Para ello Medinaflor acude a los rodales de la Junta de Extremadura que aseguran dar frutos de buena calidad. Luego los elegidos se analizan para ver si están dañados por dentro, se deshechan los que no están en condiciones y se siembran los que están sanos por dentro y por fuera. «La intención es garantizar al máximo que la bellota que vamos a plantar está en perfecto estado» explica Primitivo Rodríguez, «Pero todo lo extraordinario empieza cuando la planta se siembra». Las bellotas se introducen en en alveolos con una turba compuesta con los nutrientes investigados. Es aquí donde reside el secreto del éxito del crecimiento acelerado, misterio que por supuesto el empresario se niega a desvelar.
Una vez en los alveolos las bellotas se llevan al vivero en el que se les proporciona un medio y un riego idóneo que hace que la planta germine extraordinariamente. A los seis meses y si la planta se ha desarrollado correctamete, el alveolo que contiene la bellota estará lleno de raíces. En este momento ya se puede llevar a la dehesa. «En el campo se produce un 'boom' y se dispara el crecimiento», matiza Rodríguez. En tres años todas tendrán más de un metro y cincuenta centímetros de altura. El alto grado de supervivencia y la rapidez de crecimiento que hace que al cuarto año los árboles ya den bellota (lo normal es que sea a los 25) son las claves del éxito de esta empresa.

División de opiniones sobre la fecha de la Feria de la Castaña 2010.

Tal y como reza en en el título y así ha podido ser constatado por El Cronista, el disenso entre los expositores locales que han de participar en la próxima Feria de la Castaña sobre su fecha, en un hecho. Los que están a favor de matenerla el fin de semana del Puente de Todos los Santos, refieren que seràn tres días en lugar de dos y que en su virtud, habrá más afluencia de público y se podrán cubrir más objetivos. Los que están en contra y proponen que se celebre el fin de semana del 7 y 8 de Noviembre, argumentan que el puente de Todos los Santos son fechas tradicionales para acordarse de los que ya no están entre nosotros. acudir al cementerio y realizar las habituales tareas de mantenimiento de los sepulcros. La polémica, según noticias extraoficiales, parece que quedará zanjada en breve a favor de mantenerla en el Puente de Todos los Santos. En cualquier caso, se celebre en la fecha que se celebre, las castañas estarán garantizadas, pues los madroños se encuentran en un más que óptimo estado de maduración y los más tempranos, no tardarán mucho en comenzar a desprenderse de tan apreciado fruto.

domingo, 20 de septiembre de 2009

Las tablillas meteorológicas se encuentran dividas entre el Bar Nieto y el Bar Paradas.



Uno de los "tesoros" de la época moderna de Cabeza la Vaca, consiste en  las"tablillas" meteorológicas, dos cuadros donde se recogen las precipitaciones anuales caidas en el pueblo desde 1934 hasta 1987 la primera, y desde 1987 hasta el año anterior en curso la segunda. Los datos del año corriente,se anotan en una pizarra, donde se ofrece la información mensual y la del último día que haya llovido.

Emilio, actual encargado de tomar las mediciones en el tejado de su casa del pueblo, relata al Cronista que antes que él, los datos los recogía Miguel Blanco y antes que Miguel, D. Felix Galán (maestro jubilado de la localidad).

Aunque todas siempre han estado en un mismo sitio (en los últimos años en el Bar Parada), la segunda tablilla y la pizarra fueron llevadas al Bar Nieto el pasado verano, cuando el Bar Parada cerró temporalmente por cambio de tabernero. Sería muy conveniente que todas estuvieran situadas en el mismo lugar por el enorme interés que tienen para poder seguir la evolución del año y poderlo comparar con los años precedentes.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Con las primeras lluvias, finaliza la canícula.

Con la llegada de las primeras lluvias a nuestro pueblo, finaliza definitivamente la canícula. Trás un tórrido y largo verano, como pocos recuerdan, por fin las temperaturas comienzan a ser las propias de la altura de temporada a la que nos encontramos, esto es, unas máximas entorno a los 25 grados centígrados y unas mínimas entorno a los 16 grados. Lo que francamente ha sido inusual e inesperado, es haber padecido un verano de temperaturas superiores a los 35 grados durante todo el mes de Agosto, y que hasta este mismo fin de semana, Meteo no nos haya dado el menor respiro. Tras consultar a nuestros jóvenes de más de 75 años de edad, ninguno recuerda que los rigores del estío se hayan prolongado nunca hasta Septiembre, pués suele ser frecuente que por la Virgen de Agosto, remita el insufrible calor.
 Han sido distintos frentes borrascosos los que han propiciado la formación de varias tormentas consecutivas que ha regado nuestros campos, arrastrado maleza y traido el ansiado frescor.
Aunque para el Cronista las benditas aguas supongan una grata noticia, es más cierto que de continuar durante los días venideros, no sería realmente bueno para el engorde de la bellota (nótese su estado actual en la foto reproducida ut supra), pues si tras las lluvias viniera una subida de temperaturas, como suele acontecer por San Miguel, la bellota engordarìa excesivamente y caería antes de su maduración, perjudicándose la montanera. Qué cierto es que nunca llueve a gusto de todos.....