El Excmo. Ayto. de la localidad remitió sus condolencias y una corona de flores. La familia ha pedido a este cronista que transmita en su nombre su agradecimiento por dicho gesto.
Los vecinos del pueblo, que acudieron en masa al funeral, mantuvieron un comportamiento exquisito en todo momento y mostraron sus respetos a los restos del difunto.
D. Mariano, que nació en Bodonal de la Sierra, falleció a los 79 años de edad y vivió en nuestro pueblo desde los 9 años hasta su fallecimiento, fue veterinario de profesión y el primer Alcalde democrático del pueblo. Cuentan los vecinos a los que hemos pedido opinión, que desarrolló su labor de manera ecuánime, sin favoritismos, buscando lo mejor para su pueblo y obrando siempre en interés de todos.
Padre de siete hijos, sacó a su familia adelante de manera ejemplar, complementando su profesión con las tareas agrícolas y ganaderas propias de nuestra economía local, siendo un modelo a seguir para todos nosotros.
Como amigo, cuentan los que lo conocían que era cabal, recto pero bromista y gustaba transitar por el bar de José María para compartir sus historias y experiencias con todo aquel que lo quisiera escuchar. Era en definitiva, una de esas personas imprescindibles en cualquier coloquio, con un elevado nivel cultural dada su afición a la lectura de distintos temas de actualidad (con especial preferencia por la historia).
La relación con sus siete hijos era estrecha y cálida, según nos cuentan sus familiares más cercanos, aunque no dudaba en ejercer la autoridad de padre de familia cuando consideraba que le asistía la razón en cualquier de los asuntos que se debatían.
Profundo enamorado de su pueblo, de sus amigos y de su modo de vida, disfrutó verdaderamente cuando se trasladó a vivir desde Mérida a Cabeza la Vaca y pasó sus últimos años de vida haciendo lo que realmente le gustaba: disfrutar de su campo, de su pueblo, de su familia y de sus amigos.
Ahora que se nos ha marchado, nos damos cuenta del tremendo vacío que ha dejado en nuestros corazones. Hombres así, hay pocos.
DESCANSE EN PAZ D. MARIANO ALLA DONDE ESTE. NUNCA EL OLVIDAREMOS.
Descanse en paz
ResponderEliminarConocí a D. Mariano a finales del 2005, un día en que había caído la última gran nevada, y me pareció una persona entrañable y tremendamente vigorosa. Siempre se portó estupendamente, tanto él como su familia, con mi propia familia, toda la cual le estará eternamente agradecida por haberse desprendido de un pedazo de sus tierras para dejarnos disfrutar con ellas de la naturaleza de este pueblo y, por añadidura, de sus gentes. En estos ni siquiera 4 años hemos labrado una amistad que con pocos he conseguido tener, y me ha enseñado a amar el campo, las encinas, las paredes de piedra, ...
ResponderEliminarA pesar de su edad, su pérdida ha sido temprana pues tenía vigor para haber vivido un buen puñado más de años.
Mariano, te voy a echar muchísimo de menos...
Pepe, muchas gracias en nombre de su familia.
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